Descubre las diferencias entre la proteína animal y vegetal

La proteína es uno de los macronutrientes esenciales que debemos incluir en nuestra ingesta diaria, por los grandes beneficios que aporta a nuestro organismo, sobre todo, para nuestros músculos. Y ¿cómo podemos obtener proteína animal y vegetal? Muy sencillo: a través de la ingesta de una amplia variedad de alimentos.

Pero, ante sus beneficios, los deportistas se toman muy enserio la ingesta de proteínas. De tal forma que, si con la alimentación, no se alcanza la cantidad óptima de proteínas establecida en su dieta, recurren al uso de los suplementos deportivos, a base de proteína animal o vegetal.

La decisión de elegir entre proteína animal y vegetal, dependerá de las intenciones de cada persona. Por ello, si estás pensando en comenzar a tomar proteínas, y no sabes por qué tipo decidirte, en este post te explicamos la diferencia entre proteína animal y vegetal.

Proteína animal vs vegetal

Si hacemos uso de la lógica, la principal diferencia entre la proteína vegetal y animal, es su procedencia. De esta forma, las personas vegetarianas o veganas, por ejemplo, recurren a las proteínas vegetales, ya que están exentas de nutrientes de origen animal.

Pero, más allá de este estilo de vida, las personas suelen atender a las siguientes características.

Valor biológico

La calidad de una proteína se mide por su contenido en aminoácidos, es decir, su valor biológico. Cuando la proteína se descompone en nuestro organismo se convierte en aminoácidos, los cuales intervienen en la mayoría de los procesos metabólicos de nuestro cuerpo. Pero los aminoácidos varían en función del tipo de proteína.

La proteína animal posee todos los aminoácidos esenciales, mientras que la proteína vegetal carece de ciertos aminoácidos. Por este motivo, se considera que las primeras son de un alto valor biológico, y son una fuente completa de proteínas. Mientras que, con la proteína vegetal, es necesario combinar distintos complementos vegetales entre sí, para alcanzar una calidad nutricional parecida a la de la proteína animal.

Valor nutricional

Esta diferencia se relaciona con la densidad nutritiva, es decir, con la cantidad de proteína por gramo de alimento. Por ejemplo, una pechuga de pollo contiene un porcentaje aproximado de 22 gramos de proteína por cada 100 gramos. Valor similar a la ingesta de 100 gramos de lentejas, que suponen la obtención de 23 gramos de proteínas.

Nutrientes y calorías

Las proteínas de origen vegetal destacan en este punto, a causa de su beneficioso aporte en grasas insaturadas y fibra, aunque hay que medir bien las cantidades para no pasarse con las calorías.

Por su parte, la proteína animal se compone generalmente de grasa saturada, y suponen una cantidad de calorías inferior a las de origen vegetal, por cada 100 gramos.

Absorción y digestión

Con esto nos referimos a la asimilación por parte del organismo de los nutrientes que aportan las proteínas animales y vegetales. Así, la proteína animal se asimila mejor que la vegetal o, lo que es lo mismo, que la vegetal tiene una menor absorción.

La estructura de cada tipo de proteína es diferente, y el organismo no lo asimila ni las digiere de la misma forma. La proteína animal puede llegar a alcanzar una absorción del 90%, mientras que en la proteína vegetal oscila entre el 60% y el 70%.

Propiedades de las proteínas de origen animal

Las principales fuentes de proteína de origen animal son la carne, el pescado, así como los huevos y la leche. Estos alimentos aportan proteínas de alto valor biológico, con todos los aminoácidos esenciales y no esenciales que requiere el organismo para un buen funcionamiento. Además, aportan grasas monoinsaturadas, saturadas y colesterol.

En cuanto a vitaminas, son ricos en vitamina del complejo B, especialmente la carne. Los lácteos generan minerales como el selenio; la carne, zinc y hierro; y el pescado también genera zinc y hierro, además sodio y yodo. Con mención especial al pescado azul, que aporta distintos tipos de grasas omegas 3, muy beneficiosas para la salud.

Propiedades de las proteínas de origen vegetal

Las fuentes de proteínas vegetales, muy presentes en las legumbres y frutos secos, suponen un menor aporte de grasas saturadas, y ofrecen más fibra y minerales, como el calcio o el magnesio. Además, incluyen compuestos de alto interés nutricional, con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

Con las proteínas de origen vegetal se obtiene energía de una manera sencilla, y benefician el mantenimiento adecuado del metabolismo, la flora intestinal, además de ayudar a controlar el colesterol, entre otras cosas.

Los ácidos grasos esenciales como, por ejemplo, el Omega 3 y 6 pueden encontrarse en este tipo de alimentos, especialmente, en las semillas y los frutos secos. Al igual que los alimentos de origen animal, los de origen vegetal también son ricos en vitaminas del complejo B, especialmente, la vitamina B9, denominada ácido fólico.

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Además, por si quieres continuar formándote en el mundo de las proteínas y la suplementación, aprovechamos para recomendarte una serie de artículos con información de valor sobre este tema:

⭐ Cuándo consumir la proteína, ¿antes o después de entrenar?

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